martes, 29 de abril de 2008

Periodistas demasiado curiosos

El caos informativo desatado por el Ministerio de Sanidad y Consumo con el caso del aceite de girasol nos ha dejado auténticas perlas para la reflexión. Soria y sus subordinados han escrito en unos días una completa tesis de cómo no se deben hacer las cosas a la hora de informar a los ciudadanos, particularmente cuando lo que está en juego son dos cuestiones de una delicadeza extrema: la salud pública y la confianza de los consumidores en el mercado.
Pero la auténtica joya de la corona de este desastre informativo nos la ha regalado el presidente de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, Félix Lobo, que se atrevió a espetar en plena rueda de prensa: "No estamos aquí para satisfacer la curiosidad de los periodistas".
Alucinante. Este sujeto, que preside un "organismo autónomo adscrito al Ministerio de Sanidad", es decir, que cobra su sueldo de nuestros impuestos, considera que los periodistas somos demasiado curiosos. Olvida Lobo que los periodistas cuando preguntamos sólo hacemos de intermediarios entre las fuentes (en este caso de escasa o nula utilidad) y los ciudadanos, sí, esos mismos contribuyentes que le abonan cada mes el sueldo al presidente de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria.
Porque al menos nosotros, los periodistas, sí tenemos claro que nos debemos a quien paga para que hagamos nuestro trabajo. Que son los ciudadanos de a pie.

1 comentario:

Im-Pulso dijo...

Suscribo tu tesis. El tal Lobo se merendó a la caperucita de la información. Y no pasará nada, nadie le recriminará su estéril y aberrante prepotencia.
Un abrazo.